Olanchito, Yoro.– Bajo el sol ardiente de un primero de julio de 1951, en esta tierra fértil de Olanchito, se sembró una semilla que marcaría la historia productiva del municipio. Aquel día nació la primera Asociación de Agricultores y Ganaderos de Olanchito, promovida por la visión y el empeño del profesor Francisco Murillo Soto, hombre de ideas grandes y sueños firmes que supo reconocer la fuerza transformadora del campo y de quienes lo trabajan.

Hoy, setenta y cuatro años después, aquella iniciativa que comenzó con la ilusión de un pequeño grupo de productores se ha convertido en una de las organizaciones más representativas a nivel nacional.
Esta Organización no solo representa a los agricultores y ganaderos de la zona, sino que se ha mantenido como estandarte de la mayor región productora de leche en Honduras, llevando el nombre de Olanchito más allá de sus fronteras.
La idea original del profesor Murillo Soto trascendió la simple formalidad de crear una asociación; fue, más bien, el llamado a la unión del hombre y la mujer del campo, del esfuerzo de los que siembran y cosechan, de los que crían y cuidan el ganado con el sudor de sus manos.

Gracias a esa visión, generaciones enteras han encontrado un espacio de representación, diálogo y desarrollo, convirtiendo a la SAGO en símbolo de la identidad de Olanchito.