Venezuela enfrenta este domingo el mayor desafío electoral del último cuarto de siglo. El presidente Nicolás Maduro, que busca un tercer mandato tras 11 años en el poder, se mide contra el exdiplomático Edmundo González. Su principal rival llega arropado por una buena parte de la oposición que logró superar sus diferencias y respaldar la candidatura.
Estas elecciones presidenciales son un examen para la continuidad de gobiernos autoproclamados como socialistas, que comenzaron hace 25 años con el ya fallecido líder Hugo Chávez, que promovió exitosamente en sus primeros años programas sociales. Con el paso de los años, las autoridades fueron señaladas de mal manejo y corrupción, que llevaron al país a una crisis económica que forzó a millones a dejar el país.
Tras 11 años de compleja crisis en Venezuela, los días de escasez de alimentos han quedado prácticamente atrás, pero como muchos ganan menos de 200 dólares al mes, obtener lo esencial es una lucha constante para las familias de las zonas rurales y urbanas por igual. La gente tiene un segundo y tercer empleo, inicia pequeños negocios, intercambia servicios, hace rifas y apuesta para juntar dinero.
La situación económica es una de las razones por las que el poder del partido gobernante parece vulnerable en las elecciones presidenciales del domingo.
“He llorado porque no he tenido qué comer”, dijo hace unos días Cruz Brito, profesora de secundaria, en Maturín, en el noreste del país.
La oposición ha recalcado en campaña que la migración masiva de venezolanos no terminará si Nicolás Maduro vuelve a ganar.
En los días previos a las elecciones, María Corina Machado también respondió al presidente por sus declaraciones sobre que habría “un baño de sangre”.
“Frente a estas amenazas de violencia, nosotros necesitamos paz; frente al caos que es este régimen, nosotros representamos la estabilidad”, proclamó ante seguidores de la candidatura de Edmundo González.
El ministro de Defensa de Venezuela, general Vladimir Padrino López, afirmó que durante las primeras seis horas de la elección presidencial “no ha ocurrido ninguna incidencia que valga la pena mencionar”.
El jefe castrense pidió a los venezolanos no hacerse eco de versiones sobre supuestos hechos de violencia en las inmediaciones de centros de votación, recordando que “lo que sale en las redes no es siempre verídico”.
“La jornada ha trascurrido en paz, con civismo”, insistió.
Por su parte, el candidato del principal bloque opositor, Edmundo González Urrutia, confió que las Fuerzas Armadas harán “respetar la voluntad del pueblo”.
Los militares, a cargo de la logística y la seguridad de los comicios, son uno de los principales soportes del presidente Nicolás Maduro, quien aspira a un tercer mandato. AP