Olanchito, Yoro – En el marco de la celebración del Día del Maestro, COSECIO honrará hoy a una de las figuras más destacadas en la educación del municipio: la maestra Estilita Mirtilia Cano, mejor conocida como “Tila Cano”.
A sus 91 años, Tila Cano recibirá el Reconocimiento al Maestro del Año, un galardón que lleva el nombre del General Francisco Morazán y que celebra su dedicación y legado en la formación de generaciones de Olanchitos.
Nacida el 12 de junio de 1933, Tila Cano ha dedicado gran parte de su vida a la enseñanza en diversas escuelas de la región. Entre sus más recordados lugares de trabajo están las escuelas de El Juncal, Santa Bárbara y la Escuela Mixta San Jorge, donde dejó una huella imborrable al desempeñarse como directora. Su compromiso y pasión por la educación la han convertido en un referente para la comunidad educativa de Olanchito.
El reconocimiento que COSECIO entregará este año destaca su brillante carrera docente y su legado familiar. Tila Cano es sobrina del célebre escritor hondureño Ramón Amaya Amador, lo que añade un toque especial a su historia.
Además, es madre de cuatro hijos: Julia Aurora, Yanire, Milton y José Bardales Cano, quienes estarán presentes para compartir con orgullo este momento tan especial en la vida de su madre.
La entrega del premio se realizará durante un almuerzo especial en honor a la maestra, donde se espera la asistencia de amigos, familiares, colegas y autoridades locales.
Durante el evento, se recordarán sus años de servicio y la influencia positiva que ha tenido en innumerables alumnos a lo largo de su carrera. Los miembros de COSECIO han destacado que este reconocimiento es un pequeño homenaje a una vida dedicada a la enseñanza y al bienestar de las generaciones más jóvenes.
“Tila Cano no solo fue una maestra, fue una formadora de vidas”, expresó Erlin Ponce Presidente de COSECIO, “Ella no solo enseñaba las lecciones del aula, sino también valores y principios que muchos hoy llevan practicando” destacó Ponce.
Este reconocimiento representa un merecido homenaje a una mujer que, a través de su labor como educadora, ha contribuido al desarrollo de la sociedad de Olanchito. Su ejemplo de vida y dedicación continúa siendo una fuente de inspiración para aquellos que la conocieron en su etapa de formadora y para las nuevas generaciones de docentes que siguen su camino.