Tegucigalpa, Honduras – Con mensajes de protesta como “Blah, blah, blah”, varios puntos de Tegucigalpa amanecieron este 25 de noviembre para visibilizar la problemática de la violencia de género, en el marco del Día Internacional de la Eliminación de la Violencia Contra la Mujer.
Honduras se une a esta jornada mundial con marchas, foros y actividades culturales que buscan erradicar las agresiones contra las mujeres.
Organizaciones de derechos humanos, colectivos feministas como “Ni Una Menos” y entidades gubernamentales han liderado las manifestaciones en puntos estratégicos como el Ministerio Público.
Los rótulos instalados en estos lugares exigen justicia y políticas públicas efectivas para proteger a las mujeres. A pesar de las iniciativas, las cifras siguen siendo alarmantes: en Latinoamérica, Honduras registra una de las tasas más altas de feminicidios con 7.2 casos por cada 100,000 mujeres, según datos de la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal).
Este año, el Observatorio de la Violencia de la Universidad Nacional Autónoma de Honduras (OV-UNAH) reportó una disminución de muertes violentas de mujeres. Según su directora, Migdonia Ayestas, “en los primeros diez meses de 2024 se registraron 199 casos, una reducción significativa en comparación con los 411 reportados en 2023”. Sin embargo, cada 36 horas una mujer sigue perdiendo la vida en el país.
Además de las marchas, se han programado talleres y actividades educativas para sensibilizar a la población y empoderar a las mujeres. Sin embargo, defensoras de derechos humanos critican la falta de recursos para casas refugio y la lentitud en la aprobación de reformas legales como la Ley de Violencia Política contra la Mujer.
Este día es un recordatorio de que la lucha por eliminar la violencia de género sigue siendo urgente en Honduras, un país que busca soluciones reales a una problemática que afecta a miles de mujeres cada año.