¿Funcionará en Honduras la entrega de medicamentos a domicilio? Expertos dudan de su viabilidad pese al anuncio del Gobierno

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El reciente anuncio del Gobierno de la República sobre un ambicioso programa que busca entregar medicamentos directamente en los hogares de los pacientes ha generado una ola de reacciones mixtas entre el personal médico y especialistas en salud pública.

Aunque la idea —que se comenzará a implementar en zonas urbanas antes de expandirse a áreas rurales— parece tener un enfoque humano y progresista, expertos aseguran que la medida, tal como ha sido presentada, es una copia literal de modelos extranjeros sin adaptación a la realidad hondureña.

“Recuerden que no solo se trata de ir a dejar el medicamento; hay que ver si este paciente se lo está tomando, si está siguiendo las recomendaciones médicas. Aquí pareciera que se está copiando un sistema ‘a raja tabla’, como decimos en mi pueblo, y eso, con todo respeto, no funciona así”, advirtió un médico del sistema público consultado en condición de anonimato.

Un modelo inspirado en otros paises, pero sin la misma estructura

Son varios los países que has desarrollado este tipo de programa con éxito. En variosbde ellos, la red de atención primaria está altamente organizada: cada comunidad cuenta con un médico y una enfermera de familia que conocen de forma personal y directa el estado de salud de sus pacientes.

Estos profesionales hacen visitas periódicas al hogar, supervisan tratamientos, aplican vacunas y realizan chequeos, todo bajo una infraestructura estatal completamente centralizada y con acceso universal.

En estos paises, la entrega de medicamentos a domicilio está integrada dentro de un sistema donde el seguimiento al paciente es constante y donde la medicina preventiva es la piedra angular.

Además, la logística de transporte, almacenamiento y control está unificada bajo una sola autoridad estatal, lo que facilita la ejecución.

Honduras: una realidad distinta

En cambio, en Honduras, el panorama es muy distinto. A nivel nacional, el sistema de salud pública sufre de escasez de personal médico y de medicamentos, falta de vehículos asignados a los centros de salud, así como carencias en la conectividad entre hospitales y centros de salud.

El territorio nacional, además, tiene características geográficas complejas que dificultarían el acceso a muchas zonas rurales.

Expertos en salud pública advierten que el sistema no solo requiere vehículos y personal logístico, sino también personal médico capacitado para hacer seguimiento al tratamiento. “¿Quién verificará que el paciente esté tomando la dosis adecuada? ¿Habrá visitas de seguimiento o solo se entregará el paquete como si fuera una encomienda?”, cuestionan desde los gremios médicos.

Riesgos en la ejecución

La improvisación, alertan algunos especialistas, podría acarrear graves consecuencias: desde el uso incorrecto de medicamentos hasta el riesgo de que fármacos terminen en el mercado negro por falta de control.

“Si no hay una auditoría real y una trazabilidad en el proceso, el programa puede terminar siendo una buena idea con pésima ejecución”, opinó un médico especialista.

Aunque la iniciativa gubernamental responde a una necesidad real de mejorar el acceso a medicamentos, sobre todo en sectores vulnerables, expertos coinciden en que su éxito dependerá de una fuerte inversión en infraestructura, recursos humanos y tecnología de seguimiento, cosas que hoy por hoy escasean en el sistema de salud hondureño.

Sin un plan integral y adaptado a la realidad nacional, la propuesta corre el riesgo de ser más simbólica que efectiva. Como concluyó una de las fuentes médicas: “En salud no se improvisa. Se planifica, se escucha a los que saben y se adapta a la realidad del país”.