En una decisión judicial que ha generado controversia, tres reclusos acusados de violar a un interno en el centro penal de Olanchito han sido sobreseídos. En el juicio celebrado en los juzgados locales, el juez dictaminó sin lugar la denuncia debido a la insuficiencia de pruebas y al hecho de que el presunto afectado optó por no declarar en contra de sus supuestos agresores.
La ausencia de pruebas contundentes y la falta de testimonio directo del afectado han sido los principales motivos del sobreseimiento. Este giro en el caso ha generado cuestionamientos sobre la efectividad del sistema judicial para abordar casos de violencia dentro de los centros penitenciarios. La víctima, por razones aún desconocidas, decidió no testificar en contra de los acusados, complicando aún más el proceso.
La situación en el centro penal de Olanchito también ha sido resaltada durante el juicio. Los tres reclusos involucrados comparten una celda con otros 50 presos, lo que según el juez, contribuyó a su decisión de desestimar la denuncia. Esta realidad pone de manifiesto la necesidad de abordar problemas estructurales en los centros penitenciarios para garantizar condiciones seguras y adecuadas para quienes cumplen condena.