Desde hace seis años, el municipio de Saba, Colón, se ha erigido como un modelo ejemplar en el manejo de la basura en la región del Valle del Aguán. Con la prohibición de la quema de desechos en el botadero, y la implementación de un sistema de fosas que se llenan y cubren con tierra, Saba ha logrado transformar su entorno de manera notable.
El compromiso con la sostenibilidad ambiental ha llevado a resultados tangibles: la ausencia de moscas, la eliminación de malos olores y la invisibilidad de la basura en el paisaje urbano. Estos cambios han sido posibles gracias al enfoque proactivo de las autoridades municipales y la colaboración de la comunidad.
El alcalde municipal, Elin Acuña, resalta la importancia de este enfoque: “Hoy estamos dándole mantenimiento a la fosa en uso, y este proceso se repite cada vez que se llena. Es un compromiso constante con la limpieza y el cuidado del medio ambiente”.
El impacto positivo de estas medidas se extiende más allá de lo estético: se traduce en una mejor calidad de vida para los habitantes de Saba y en la protección del entorno natural. Además, el ejemplo de Saba inspira a otras comunidades a adoptar prácticas sostenibles en la gestión de residuos.
El éxito de Saba en el manejo de la basura demuestra que, con voluntad política y la participación activa de la ciudadanía, es posible crear entornos más limpios y saludables. Saba se destaca como un faro de esperanza y un ejemplo a seguir en la lucha por un futuro más sostenible para todos.
