En el marco del juicio contra el expresidente Juan Orlando Hernández, la Fiscalía del Distrito Sur de Nueva York presentó este lunes al testigo John Miller, un oficial de Control de Armas de Fuego de la División de Tecnología de Armas de Fuego y Municiones de la ATF.
Su testimonio, crucial para el proceso, arrojó luz sobre la naturaleza y el funcionamiento de las armas implicadas en el caso.
Miller compareció ante el jurado en la sala 26B de la Corte del Distrito Sur de Nueva York, trayendo consigo un M-16 meticulosamente revisado para garantizar su seguridad.
Este gesto, además de ser protocolar, busca contextualizar la naturaleza de las armas que son objeto de análisis en el proceso judicial.
El juez Kevin Castel, con su habitual rigor, otorgó a la Fiscalía del Distrito Sur de Nueva York la autorización para mostrar al jurado una selección de armas, entre las que se encontraban el AK-47, el M-60 y el RPG, junto con el M-16 presentado por Miller.
Sin embargo, esta exhibición se realizó bajo estrictas medidas, permitiendo la visualización de cada arma de manera individual y dentro de un estuche cerrado.
Las implicaciones de estas armas en el juicio son significativas, particularmente en relación con uno de los cargos imputados al expresidente Juan Orlando Hernández, relacionado con el uso de armamento destructivo.
El fiscal solicitó que se registrara en el acta la posesión de la “Prueba 605” por parte de Miller, refiriéndose al M-16 presentado en la Corte.
El experto en armas detalló ante los presentes en la sala 26B las características y capacidades de las armas exhibidas, desde el tipo de munición utilizado hasta la demostración de una ametralladora.
También se exhibió un cohete PG-7. Miller explicó: “Esta es un arma de fuego no destinada a deportes”, que “se autodestruye a una distancia de 900 metros y puede penetrar de 4 a 5 pulgadas de armadura laminada en frío”, proporcionando al jurado una visión detallada de las armas.
La Fiscalía subrayó que durante el juicio se presentó una “amplia evidencia” y testimonios de “co-conspiradores sobre armas de fuego”.
Además, destacó que el expresidente Juan Orlando Hernández “asistió al menos a una reunión donde se discutieron este tipo de armas en relación con la obtención de fondos del narcotráfico”.
Esta exhibición, aunque crucial para la comprensión del caso, ha sido objeto de cuestionamientos por parte de la defensa, que ha señalado la espectacularidad de la presentación como un último recurso por parte de la acusación.
La presentación de las armas ante el jurado no solo busca informar sobre su naturaleza y función, sino también establecer vínculos directos entre el material probatorio y los hechos imputados al acusado.