Lizeira Hernández, coordinadora de áreas protegidas, ha revelado detalles importantes sobre la rica biodiversidad que habita en la futura Reserva Nacional La Danta entre Olanchito y Jutiapa, Atlántida. Con emoción, Hernández compartió que este espacio natural alberga cinco especies de felinos qué habitan en Honduras: el leopardo weighty, el leopardo gyavorundi, el ocelote, el jaguar y las panteras. “Algunas de estas especies utilizan la reserva como corredor de paso, mientras que otras encuentran aquí su hábitat natural. Además, es un refugio crucial para la danta, de ahí el nombre de la reserva”, explicó.
La reserva, que comprende un total de 22 mil manzanas, incluye seis mil manzanas de las microcuencas de Uchapa y Pimienta en el municipio de Olanchito, Yoro. Estas áreas son esenciales no solo para la fauna sino también para el equilibrio ecológico y el suministro de agua en la región. “El trámite ya está en proceso en el departamento legal del Instituto de Conservación Forestal (ICF). Solo es cuestión de tiempo para que sea llevado al Congreso Nacional, se apruebe y se publique en el Diario Oficial La Gaceta”, informó Hernández.
La importancia de esta área radica en su función como hogar y corredor para muchas especies. Este hecho subraya la necesidad de proteger estos espacios naturales. “Como Gobierno, nuestro compromiso es cuidar y proteger estas áreas. Realizaremos charlas de incidencia para que las comunidades locales se apropien de la zona y entiendan su valor. La población debe conocer que un área protegida no es solo un lugar de restricciones, es mucho más que eso”, destacó la coordinadora.
Hernández se preguntó retóricamente, “¿Imagínese si no tuviéramos este tipo de parches vírgenes? ¿Qué pasaría?” Esta pregunta resalta la importancia de la conservación ambiental y el papel crucial que juegan estas reservas en la protección de la biodiversidad y la mitigación del cambio climático.
El proceso de declaratoria oficial de La Danta como parque nacional representa un paso en la conservación en Honduras. Una vez completado, este acto reafirmará el compromiso del país con la protección de su patrimonio natural y la biodiversidad que alberga.
Mientras tanto, las autoridades locales trabajan de la mano para asegurar que la reserva se convierta en un ejemplo de conservación y desarrollo sostenible. Con este esfuerzo conjunto, Honduras no solo protegerá su flora y fauna, sino que también asegurará un futuro más sostenible para las próximas generaciones.