Tocoa, Colón – En una camilla del Hospital San Isidro de Tocoa, una adolescente de 17 años se debate entre la vida y la muerte tras ser presuntamente abusada por tres militares el pasado fin de semana en una aldea del municipio de Tocoa, departamento de Colón.
La noche del sábado, la joven asistió a una fiesta en Los Leones, una apartada aldea de Trujillo, a pesar de las súplicas de su madre, quien temía por su seguridad. Su instinto materno no falló, y la tragedia golpeó a esta humilde familia campesina.
Testigos relataron que tres hombres vestidos con uniformes de la Policía Militar y del Orden Público (PMOP) de Trujillo llegaron al evento, se acercaron a la adolescente y la sacaron del lugar. Fue hasta la mañana siguiente, cuando el sol comenzó a iluminar las calles, que la joven fue encontrada en estado crítico, con golpes en la cabeza y signos de violación, en una zona aledaña de la aldea.
Inmediatamente después de ser encontrada, la joven fue trasladada al Hospital San Isidro de Tocoa, donde su condición sigue siendo delicada. Sus padres, desesperados, están solicitando ayuda para transferirla a un centro médico en San Pedro Sula, donde podría recibir atención especializada.
La familia ha presentado una denuncia ante la Dirección Policial de Investigaciones (DPI) contra los presuntos agresores, exigiendo justicia y una investigación exhaustiva. La comunidad de Tocoa, conmocionada por el atroz incidente, clama por respuestas y acciones contundentes por parte de las autoridades para que los responsables enfrenten las consecuencias de sus actos.