Olanchito, Yoro – La tarde del 21 de marzo, la ciudad de Olanchito recibió la triste noticia del fallecimiento de Aida Rosa Suazo Rodas de Quesada, una mujer cuya vida estuvo marcada por el compromiso con la educación, la sociedad y la fe.
Nacida en La Paz en 1934, su camino la llevó a Olanchito, donde formó una distinguida familia y dejó una huella imborrable en la sociedad.
Desde su juventud, Aida de Quesada entendió que servir a los demás era su misión de vida. Fue maestra de vocación, catequista, empresaria, líder social y parte fundamental de innumerables proyectos comunitarios.
Junto a su esposo, Edgardo “Nuncho” Quesada, construyó no solo un hogar, sino también emprendimientos que marcaron la historia de la ciudad, como el recordado Bazar Aida y el Hotel Quesada.
Más allá de sus logros empresariales, su verdadero legado se encuentra en las vidas que tocó: sus cuatro hijos, sus nietos y los numerosos jóvenes a quienes ayudó a educarse y salir adelante.
Su labor en instituciones de beneficencia, cooperativas y la iglesia católica es testimonio de su incansable espíritu altruista.
Este sábado 22 de marzo, su cuerpo fue velado en una Funeraria de la ciudad y el domingo sus restos mortales fueron sepultados en el Cementerio General de Olanchito, donde descansará junto a su amado esposo.
Hoy, Olanchito despide a una de sus más queridas hijas adoptivas, con gratitud por su entrega y amor incondicional. Que brille para ella la luz perpetua y que su ejemplo de vida continúe inspirando a las generaciones futuras.
