El FBI identificó a Thomas Matthew Crooks, de 20 años y residente en Bethel Park, Pensilvania, como el sospechoso del intento de asesinato del sábado del expresidente de Estados Unidos, Donald Trump, en un acto de su campaña electoral.
El sospechoso fue abatido a tiros por el Servicio Secreto segundos después de que supuestamente disparara hacia un escenario donde Trump estaba hablando en Butler, Pensilvania. El FBI dijo que estaba trabajando para determinar el motivo del ataque, en el que murió un asistente y otros dos espectadores resultaron heridos de gravedad.
Los registros estatales de votantes muestran que Crooks estaba registrado como republicano. Las elecciones del 5 de noviembre habrían sido la primera vez que Crooks habría podido votar en unas presidenciales. El mismo vivía a una hora de distancia del lugar del tiroteo, en Butler.
En tanto, el padre de Crooks, Matthew Crooks, de 53 años, dijo a CNN que estaba tratando de averiguar lo que sucedió y que esperaría hasta hablar con las fuerzas del orden antes de referirse a su hijo.
Por su parte, las fuerzas de seguridad dijeron el sábado que Crooks no llevó ninguna identificación al lugar del tiroteo y tuvo que ser identificado utilizando otros métodos. “Ahora mismo estamos mirando fotografías y estamos intentando analizar su ADN y obtener una confirmación biométrica”, dijo Kevin Rojek, agente especial del FBI al mando, durante una rueda de prensa.
USA Today informó que docenas de vehículos de las fuerzas del orden estaban estacionados ante una residencia que figura en la dirección del registro de votantes de Crooks. Agentes de la Oficina de Alcohol, Tabaco, Armas de Fuego y Explosivos se encontraban en el lugar y un escuadrón antibombas estaba en la residencia, agregó.