El Vaticano se prepara para el funeral del Papa Francisco; sellan su apartamento y organizan actos fúnebres

Especial PAPA FRANCISCO

Ciudad del Vaticano. La Santa Sede ha comenzado este lunes el proceso de organización de los funerales del Papa Francisco, quien falleció hoy a los 88 años, tras varios meses de complicaciones respiratorias.

De acuerdo con las normas vigentes del Vaticano, el funeral se celebrará entre el cuarto y el sexto día tras su muerte, por lo que se espera que tenga lugar entre el próximo viernes 26 y domingo 28 de abril, a la espera de confirmación oficial por parte del Colegio Cardenalicio.

Según lo estipulado en el ‘Ordo Exsequiarum Romani Pontificis’ —el documento que regula las exequias papales— y la constitución apostólica ‘Universi Dominici Gregis’, se ha activado el protocolo de “sede vacante”, lo que marca oficialmente el fin del pontificado de Francisco, quien fue el primer papa latinoamericano en la historia de la Iglesia Católica.

El cardenal camarlengo Kevin Joseph Farrell, de nacionalidad estadounidense, lideró este mismo lunes por la tarde la constatación oficial del fallecimiento del Santo Padre en su residencia habitual, la Casa Santa Marta, donde vivió desde su elección en 2013. Posteriormente, se realizó el sellado oficial del apartamento pontificio en la segunda planta de dicha residencia, acto simbólico y legal que evita cualquier manipulación de documentos o bienes personales del Pontífice.

El protocolo incluye también el sellado del apartamento papal tradicional en la tercera planta del Palacio Apostólico, a pesar de que Francisco nunca lo habitó, optando por un estilo de vida más austero y cercano en la Casa Santa Marta.

El cuerpo del Papa será velado en la capilla privada de su residencia, donde permanecerá hasta el próximo miércoles, cuando será trasladado a la Basílica de San Pedro, donde estará expuesto para que los fieles puedan despedirse.

Será también el cardenal camarlengo quien, como establece el protocolo, proceda a la anulación del Anillo del Pescador y el sello oficial del pontificado, para evitar que se emitan documentos en nombre del papa fallecido. Estos actos marcan formalmente la clausura de su pontificado y el inicio del periodo de sede vacante, hasta la elección de un nuevo sucesor.

El martes está prevista la primera reunión del Colegio Cardenalicio, en la cual se definirá oficialmente la fecha del funeral, que se espera reúna a jefes de Estado, dignatarios eclesiásticos, y miles de fieles provenientes de todo el mundo.

La partida del Papa Francisco marca el fin de una era caracterizada por la sencillez, la cercanía al pueblo y el impulso de reformas profundas en la Iglesia. Mientras el Vaticano se alista para darle el último adiós, millones de católicos en todo el mundo elevan oraciones por el descanso eterno de un pontífice que transformó la imagen del papado en el siglo XXI.