Olanchito rinde tributo a su esencia literaria con una escultura

Cultura

Bajo la sombra de los árboles centenarios del parque central de Olanchito, una nueva obra se alza como un grito de identidad y memoria. Se trata de la escultura inspirada en los libros “Cipotes y Prision Verde”, obras cumbre del escritor olanchitense Ramón Amaya Amador.

La pieza, de bronce brillante, impresiona por su fuerza simbólica: de un bloque de libros —símbolo de conocimiento y cultura— emerge un cuerpo humano atrapado, una mano gigante convertida en rostro que grita, como queriendo romper el silencio y la opresión.

Es el retrato de la niñez humilde, del espíritu que busca liberarse a través de la educación, la palabra y la lucha por la dignidad. En su base, una inscripción contundente: “CIPOTES de Ramón Amaya Amador”.

Esta obra es, además, un homenaje a la oratoria y a la literatura de Olanchito, dos pilares de su identidad cultural. Fue esculpida por una hija de la ciudad, la arquitecta Madrid, y gestionada para su creación y colocación en el parque central por el Comité de la Semana Cívica de Olanchito, COSECIO.

El acto de inauguración reunió a autoridades civiles, escritores, maestros, estudiantes, gestores culturales y ciudadanos en general, quienes reconocieron en esta pieza un símbolo del talento local y de la fuerza de la palabra.

Más que una obra artística, la escultura es un manifiesto: refleja la historia viva de un pueblo que ha encontrado en las letras una forma de resistencia, identidad y esperanza.

En cada pliegue de esa mano que se alza se lee el esfuerzo de generaciones que, desde la escuela y la plaza pública, han sembrado en los niños y jóvenes la semilla de la lectura, la crítica, la oratoria y la imaginación.

Así, Olanchito reafirma con orgullo su título de “Tierra de Escritores y Poetas”. Esta escultura se convierte en una luz para las nuevas generaciones, recordándoles que es posible trascender mediante la palabra, el arte y la memoria.