Olimpia aumentó su hegemonía ante Motagua al superarlo 2-0 en el clásico capitalino que engalanó la fecha siete del torneo Clausura.
Los “leones” volvieron a demostrar que le tienen la medida tomada a sus vecinos y aumentaron a 12 partidos su paternidad en los últimos enfrentamientos.
Además, los campeones aumentaron a 39 partidos su invicto quedando a uno de igualar su mejor marca; y con los tres puntos agregaron un ingrediente más de atracción al campeonato al igualar la cima en puntos con Marathón, Motagua y Real España con 13 unidades.
El clásico inició con pocos brillos y contadas emociones debido a la sobrepoblación en el medio campo de ambos equipos, pero a los 43 minutos un potente derechazo de Michael Chirinos adornado por la lanzada de Jonathan Rougier, y que terminó con el balón en el fondo de la red y con el 1-0 a favor de los blancos, hizo que el derbi capitalino aumentara en revoluciones y emociones.
Los azules tras el gol en contra se fueron con todo en busca del empate, Walter Martínez de cabeza remató y atento Edrick Menjívar salvó. Seguidamente Juan Delgado de larga distancia probó y estuvo cerca de empatar.
En los 40 minutos antes apenas un remate de José Mario Pinto que tapó Rougier y un centro disparo de Yeison Mejía, había sido los más atractivo del esperado juego, que lució gris ante la falta de gradas y público acostumbrado en el sector de sol centro, debido a las remodelaciones de la instalación.
En el complemento Motagua siguió buscando la paridad, pero sus volantes nunca pudieron tener una conexión concreta con su goleador Agustín Auzmendi, ni con el delantero Rubilio Castillo.
Dos disparos desviados del “pistolero” fue lo más cercano de las “águilas” en la segunda parte.
La lápida del juego y que selló la fiesta blanca tuvo el mismo protagonista que liquidó la final del Apertura, el colombiano Yustín Arboleda a los 89 minutos en contragolpe se quitó la marca de Rougier y con el marco a placer mandó el balón al fondo y puso a festejar a los olimpistas.