La ahora exsecretaria de Defensa Nacional, Rixi Moncada, presentó este martes su renuncia irrevocable al cargo, efectiva a partir del miércoles 28 de mayo, con el propósito de dedicarse plenamente a su campaña presidencial como candidata del Partido Libertad y Refundación (Libre) para las elecciones de Noviembre.
En una carta dirigida a la presidenta de la República, Xiomara Castro, Moncada expresó su “respeto y gratitud de siempre” y agradeció la confianza depositada en su gestión al frente de la Secretaría de Defensa.
La renuncia, señaló, se enmarca en la normativa constitucional y los resultados obtenidos en el proceso primario interno del pasado 9 de marzo, en el cual fue electa como candidata oficial de Libre.
Moncada resaltó los logros obtenidos durante su gestión junto al Estado Mayor Conjunto de las Fuerzas Armadas y el General Roosevelt Leonel Hernández Aguilar, destacando iniciativas como el “Programa Cero Deforestación” con los batallones verdes, la Cátedra Morazánica, la repotenciación de la Fuerza Aérea y del Ejército, y acciones contra el narcotráfico como decomisos de drogas y destrucción de plantaciones de cocaína.
“Acciones que han sido reconocidas nacional e internacionalmente”, subrayó Moncada en el documento.
La ahora excandidata reiteró en su comunicado su “compromiso revolucionario” con el proyecto socialista democrático que impulsa el partido Libre y afirmó que continuará “con el mismo compromiso que nos ha unido al pueblo en resistencia”.
A continuación, un extracto del documento oficial entregado a la Casa Presidencial:
“Me dirijo a usted con el respeto y gratitud de siempre para presentar mi renuncia irrevocable […] la cual he ejercido bajo sus instrucciones y liderazgo. Esta decisión se enmarca dentro de la norma constitucional y los resultados electorales obtenidos en el proceso primario realizado […] donde fui electa como Candidata a la Presidencia de la República 2026-2030 en representación de nuestro gran partido Libertad y Refundación Libre”.
Con esta renuncia, Moncada se convierte oficialmente en la primera candidata que deja su cargo dentro del gabinete de gobierno para competir por la presidencia, en medio de un ambiente político cada vez más polarizado.
