Olanchito, Yoro – Por segunda noche consecutiva, los habitantes de la comunidad de Lomitas del Este, en el municipio de Olanchito, mantienen bloqueada la carretera CA-13 entre Sabá y Olanchito, a la altura del sector conocido como Restaurante Oasis, entre las comunidades de La Cuatro y Lomitas.

La acción es parte de una protesta pacífica pero firme, en la que los pobladores exigen al Gobierno Central que atienda una problemática urgente y de alto riesgo: la canalización y construcción de gaviones en la parte alta del río Monga, cuyas crecientes han dejado vulnerable a esta comunidad en repetidas ocasiones.
Según líderes comunitarios, en los últimos años el río Monga ha socavado terrenos productivos y viviendas, especialmente durante las temporadas de lluvia, y hasta ahora las promesas de mitigación del riesgo no se han traducido en acciones concretas.
“No queremos esperar a que el río arrase con nuestras casas para que nos escuchen. Hemos solicitado estos proyectos desde hace años y nadie responde”, expresó uno de los voceros de la comunidad durante la manifestación nocturna.
El tránsito en la zona permanece interrumpido desde horas de la noche y la presencia de pobladores con pancartas, piedras y fogatas refleja el nivel de frustración de la comunidad, que considera que el tema excede las capacidades del gobierno municipal y requiere intervención directa del nivel central.
Hasta el momento, no se ha hecho presente ninguna comisión técnica ni delegados del gobierno central, por lo que los pobladores han anunciado que la toma continuará de manera indefinida hasta obtener una respuesta formal.
La carretera entre Sabá y Olanchito es un eje vial clave para el tránsito comercial y agrícola de la zona norte del país, por lo que el cierre comienza a generar afectaciones económicas y de movilidad en varias comunidades del Valle del Aguán.
Esta protesta se suma a otras manifestaciones recientes en el mismo corredor, que evidencian un creciente sentimiento de abandono institucional en los sectores rurales del país, donde las necesidades básicas siguen sin resolverse y la única vía de presión parece ser, literalmente, cerrar la vía.