La comunidad de Campo Nuevo, ubicada en el corazón de Medio Aguán, se encuentra en estado de conmoción tras el reporte de la muerte de una abuelita y su nieto a causa del dengue hemorrágico. Además, otro familiar se debate entre la vida y la muerte en cuidados intensivos en un hospital de San Pedro Sula, mientras que varios casos más han sido atendidos en Clínicas Privadas.
La alarma se ha extendido entre los residentes de Campo Nuevo, quienes temen por la propagación del virus en sus hogares. “Como vecinos estamos alarmados porque se conocen otros casos en casas cercanas. Esta semana estamos realizando operativos de limpieza en todo el perímetro, pero también debemos intervenir otras comunidades aledañas”, expresó con preocupación Martín Cruz, habitante de la zona.
Campo Nuevo, con unas 180 viviendas, se enfrenta a una situación crítica, ya que carecen de un técnico en salud que pueda brindar atención especializada ante la propagación de enfermedades como el dengue. “Pedimos a la población conciencia y ayuda a los gobernantes del sector. Nos estamos muriendo en Campo Nuevo”, manifestó Cruz, reflejando la desesperación que se vive en la comunidad.
Ante esta emergencia, el personal médico y enfermeras auxiliares del centro de salud de Armenia, junto con técnicos en salud de la empresa Standard Fruit, realizaron este lunes y martes una visita casa a casa por la comunidad en busca de casos febriles. Además, aplicaron químicos a los recipientes de agua como pilas en un esfuerzo por contener la propagación del virus.
La situación en Campo Nuevo es grave y requiere de la atención urgente de las autoridades competentes. La vida de los habitantes de esta región está en peligro, y es crucial que se tomen medidas inmediatas para controlar la epidemia de dengue hemorrágico y prevenir más pérdidas irreparables. ¡La comunidad necesita ayuda ahora!