En los rincones más remotos de Honduras, como el municipio de Marale en Francisco Morazán, los residentes enfrentan una dura realidad al buscar atención médica para sus seres queridos enfermos. La falta de infraestructura y transporte adecuado obliga a los lugareños a recurrir a medidas extremas para llegar al centro asistencial más cercano.
Una imagen conmovedora capturada en la carretera central muestra a vecinos de Marale descendiendo a sus enfermos en hamacas, en un desgarrador viacrucis hacia la ayuda médica. Este escenario se repite cada vez que surge una emergencia de salud en la comunidad, dejando claro el difícil acceso que enfrentan los hondureños de tierra adentro para recibir atención médica oportuna.
La situación pone de relieve la necesidad urgente de mejorar las infraestructuras de salud y transporte en estas áreas marginadas, así como de implementar medidas para garantizar que todos los ciudadanos, independientemente de su ubicación geográfica, tengan acceso equitativo a servicios médicos adecuados.