Costa Rica se despide con la cabeza alta

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La selección de Costa Rica no pudo obrar el milagro y pasar a los cuartos de final de la Copa América, pero se despidió del torneo con la cabeza muy alta, tras ganar por 2-1 a Paraguay en Austin y regalarse, al menos, unos momentos de esperanza en el que el imposible parecía posible.

Los goles de cabeza de Francisco Calvo y del joven de 19 años Josimar Alcócer en los primeros siete minutos hicieron soñar momentáneamente a Costa Rica, que para avanzar necesitaba ganar, la derrota de Brasil, y también debía recuperar una diferencia de goles de seis tanto.

No pudo el equipo del técnico argentino Gustavo Alfaro. El gol del definitivo 1-2 de Paraguay, obra de Ramón Sosa, acabó con las esperanzas de clasificación, pero no manchó el gran trabajo de los ticos. Tienen un grupo joven y un seleccionador de gran experiencia. A dos años del Mundial, demostraron que tienen argumentos para ser competitivos.

Paraguay se despidió de la Copa América con tres derrotas de tres. La afición de la Albirroja intentará consolarse con la participaciónn de su selección en los Juegos Olímpicos de París.

Un arranque soñado

Hizo lo que estaba en su poder la selección de Alfaro, que tuvo un comienzo soñado con dos goles en los primeros siete minutos. Fue Calvo en romper la igualdad en el tres al cabecear un perfecto centro de Joseph Mora desde la banda izquierda.

Ante un Paraguay tocado anímicamente tras su tempranera eliminación de la Copa América, Costa Rica agredió y amplió distancias apenas cuatro minutos después con un gran gol de Alcócer con un disparo raso desde fuera del área que fulminó el portero.

Era el 2-0 de los ticos en un ambiente de fiesta, pero también de alta tensión, con un ojo siempre puesto en el partido de Santa Clara, donde Brasil se adelantaría poco después con una gran falta directa de Raphinha.

Paraguay, al igual que en el partido contra Brasil, tuvo en Enciso a su fuente de juego. El joven talento del Brighton, que también apunta a integrar al equipo albirrojo en los próximos Juegos de París, tuvo la mejor oportunidad de su equipo con un potente disparo desde fuera del área que el meta Patrick Sequeira consiguió enviar a córner.

La buena noticia para Costa Rica llegó pocos segundos después de que el colegiado pitara el final de la primera mitad. Fue el gol de Daniel Muñoz que igualó el choque en el Levi’s Stadium al borde del descanso.

Un adiós con orgullo

Se aferraban al milagro los ticos. Comenzaron la reanudación con la necesidad de que Colombia completara la remontada y con una diferencia de goles de cuatro tantos por recuperar. Pero la ilusión duró muy poco.

A los diez minutos de la segunda mitad, Ramón Sosa anotó su primer gol como internacional absoluto con un maravilloso derechazo curvado y subió el 1-2 al luminoso que volvía a poner una montaña entre Costa Rica y el pase a cuartos.

Se notó el golpe psicológico para Costa Rica, que tras el gol de Paraguay bajó su posición y se centró en el intento de defender su ventaja para sumar, al menos su primera victoria en esta Copa América.

Y lo consiguió gracias también a una extraordinaria parada del heredero de Keylor Navas, el meta Patrick Sequeira, quien negó el empate bajo palos a Ángel Romero en el 94.