El secuestro de la política en Honduras

Opiniones

La fiebre por un puesto político ha llevado a que los cargos de elección popular sean acaparados por los mismos apellidos, creando una situación alarmante en nuestra democracia. En Honduras, es común ver casos de marido y mujer, hermanos y otros familiares que, sin pudor alguno, se reparten las posiciones de poder, obstaculizando el acceso a personas con ideas frescas y visión para gobernar el país.

Este fenómeno no es nuevo, pero su incremento en los últimos años es preocupante. Vemos al marido como alcalde y a la mujer como diputada, o al hermano de alcalde y la hermana de diputada. Esta distribución familiar de los cargos políticos no solo es un insulto a la inteligencia de los ciudadanos, sino que también demuestra una flagrante falta de capacidad y ética para administrar y legislar en beneficio del país.

Es evidente que para muchos de estos políticos y sus allegados, el servicio público ha dejado de ser una vocación para convertirse en un medio de vida fácil, sostenido por los impuestos del pueblo. No les basta con asegurar su propio sustento; ahora buscan extender su influencia a sus parejas y hermanos, perpetuando así un círculo vicioso de poder y mediocridad.

Ante este panorama, es legítimo preguntarse por qué Honduras se encuentra en una situación tan crítica. La respuesta es clara: la clase política que nos gobierna ha secuestrado los puestos de elección popular, manteniendo al país en un estado de miseria y subdesarrollo. Mientras estos clanes familiares continúan en el poder, no hay espacio para el progreso ni para la verdadera representación de los intereses del pueblo.

Es urgente que los hondureños despertemos y tomemos acción. No podemos seguir permitiendo que los mismos nombres y apellidos controlen nuestro destino. La democracia debe ser una plataforma para el cambio y la renovación, no un feudo de unos pocos.

La solución está en nuestras manos. Debemos exigir transparencia, competencia y capacidad en nuestros representantes. Solo así podremos liberar a nuestra nación del secuestro político y construir un futuro donde todos tengamos la oportunidad de contribuir al bienestar común.