Fabio Lobo, hijo del expresidente hondureño Porfirio Lobo Sosa (2010-2014), fue liberado en Nueva York la semana pasada, tras cumplir una sentencia de nueve años en prisión por cargos relacionados con el narcotráfico.
Lobo fue arrestado en Haití en 2015 y sentenciado en 2017 a 24 años, aunque su condena fue reducida a 11 años gracias a su cooperación con la justicia estadounidense.
La abogada e investigadora social, Carolina Meléndez, acreditada ante la Corte del Distrito Sur de Nueva York, confirmó que el pasado 23 de septiembre, la jueza Lorna G. Schofield firmó la orden de liberación de Lobo bajo libertad condicional por dos años. Durante este periodo, Fabio Lobo deberá presentarse periódicamente ante el Departamento de Libertad Condicional y cumplir con las leyes de inmigración. Actualmente, reside en el estado de New Jersey junto a un familiar.
Lobo jugó un papel crucial en el juicio contra el expresidente Juan Orlando Hernández, quien fue condenado a 45 años de prisión por delitos de narcotráfico. Su testimonio y cooperación con las autoridades estadounidenses le permitieron acceder a una reducción de su condena, en virtud de la ley que otorga beneficios a testigos colaboradores.
Meléndez indicó que es probable que otros testigos clave, como los líderes del cártel de Los Cachiros, también puedan beneficiarse de una reducción de sentencia debido a su colaboración con la Fiscalía del Distrito Sur de Nueva York. El testimonio de Debis Leonel Rivera Maradiaga, líder de Los Cachiros, ha sido fundamental en varios juicios recientes y se espera que tenga un impacto en el destino de otros colaboradores.
Además, la abogada señaló que podrían surgir nuevas solicitudes de extradición durante los próximos seis meses, antes de que expire el Tratado de Extradición vigente entre Estados Unidos y Honduras.