Olanchito, Yoro. – El flagelo del avigeato vuelve a golpear a los productores del municipio de Olanchito, luego de que en las últimas horas se denunciara el robo y destazo de dos vaquillas en la aldea de Nombre de Jesús, zona rural del municipio.
De acuerdo con la denuncia, los animales fueron sustraídos durante la noche y sacrificados en los mismos potreros, práctica que refleja la organización de los delincuentes que operan en áreas de difícil acceso.
El hallazgo de los restos encendió nuevamente las alarmas entre los ganaderos, quienes recuerdan que este delito ya causó en el pasado fuertes pérdidas económicas al sector productivo local.
Hasta el momento no se ha confirmado si otras fincas de la región han sido afectadas, sin embargo, productores aseguran que el temor a denunciar contribuye a que el problema se mantenga y se expanda.
“Muchos prefieren quedarse callados por miedo a represalias, pero eso solo hace más fuerte a los delincuentes”, lamentó un ganadero de la zona.
El avigeato, considerado uno de los delitos más dañinos para la economía rural, sigue siendo un desafío para las autoridades de seguridad y para las asociaciones de productores, que reclaman mayor vigilancia y respuesta inmediata.
