Olanchito, Yoro: Con su imponente presencia, la torre de la Glorieta del Parque Central de Olanchito ha sido testigo silencioso de los momentos más significativos de esta ciudad cívica durante los últimos 69 años.
Desde su inauguración el 11 de septiembre de 1955, esta estructura se ha convertido en un ícono emblemático que define el paisaje urbano y el carácter distintivo de Olanchito.
A lo largo de décadas, la torre de la Glorieta ha sido mucho más que un simple elemento arquitectónico; ha sido un símbolo de identidad y pertenencia para los habitantes de este municipio. Durante años, su reloj marcó el paso del tiempo, recordando a los “olanchitos” cada hora con sus resonantes campanadas, una melodía que se convirtió en parte inseparable del día a día de la ciudad.
En el corazón de la torre, se encuentra una sirena cuyo ulular ha servido como guía para muchos residentes de Olanchito. A través de sus sonidos característicos, los habitantes identifican los distintos momentos del día, desde el inicio de la jornada laboral hasta el final de la tarde.
La sirena del Parque Central anuncia las ocho de la mañana, las once y doce del mediodía, así como las dos y las cuatro de la tarde, marcando el ritmo de la vida en la ciudad.
Este peculiar sistema de hora, único en Honduras, ha otorgado a Olanchito una identidad singular y especial entre las demás ciudades del país. Para los “olanchitos”, la sirena del Parque Central no solo indica la hora, sino que representa la esencia misma del pueblo y la conexión con su historia y tradiciones.
En este año especial, al conmemorar el 69 aniversario de la Glorieta del Parque Central, los Comejamos celebramos con orgullo este símbolo de la ciudad, recordando con nostalgia los momentos compartidos alrededor de esta estructura icónica que ha sido parte fundamental de nuestras vidas durante generaciones.