Tegucigalpa, Honduras. – La madrugada de este sábado, el sector El Triángulo de Lomas del Guijarro en la capital fue escenario de momentos de angustia cuando una mujer se lanzó desde un cuarto piso de un edificio de apartamentos, contiguo al Ministerio Público.
El hecho generó conmoción y versiones encontradas en redes sociales y medios de comunicación.
En un inicio, vecinos relataron que la víctima pedía ayuda desesperadamente durante casi una hora, asegurando que intentaban hacerle daño a su hija. A pesar de las múltiples llamadas al 911, la asistencia tardó en llegar.
Finalmente, la joven tomó la desesperada decisión de saltar desde una altura aproximada de ocho metros para, según sus gritos, salvar su vida.
Sin embargo, horas después del incidente, la Policía Nacional de Honduras emitió un comunicado a la opinión pública aclarando que lo ocurrido “no fue más que un lamentable episodio producto del abuso del alcohol y no de la falsa versión que irresponsablemente publicaron algunos medios de comunicación”.
Según la institución, a las 00:30 horas se recibió una denuncia a través del Sistema Nacional de Emergencias 911 alertando que una mujer se había lanzado desde el cuarto nivel. Al llegar los agentes policiales, confirmaron que la información era real: una joven, identificada solo como Daniela, en completo estado de ebriedad, había trepado por el balcón y saltado al vacío porque su compañera de vivienda le impedía salir a comprar más cerveza.
La ciudadana fue encontrada con lesiones y atendida por paramédicos del 911 en la ambulancia #1, siendo trasladada al Hospital Escuela, donde se confirmó que presenta fractura en el pie izquierdo y fuerte dolor de cabeza.
En sus declaraciones posteriores, la joven relató que había bebido en exceso, que solo recuerda que quería seguir consumiendo alcohol y que su amiga no la dejaba salir a la calle. En medio de la confusión, comenzó a gritar que “cinco hombres la querían llevar” con la única intención de que los vecinos abrieran alguna puerta o ventana para poder escapar. Finalmente, desesperada, intentó hacerlo por el balcón y terminó lanzándose.
La propia afectada reconoció que no había hombres en el apartamento y que estaba únicamente con su amiga, descartando cualquier situación de violencia sexual.
Aseguró también que esta experiencia le hizo reflexionar y prometió no volver a consumir alcohol ni permanecer en ese edificio, donde se realizan fiestas constantes.
Vecinos del sector confirmaron que desde horas de la tarde se escuchaba música a alto volumen en el apartamento de las jóvenes y que ambas suelen realizar fiestas hasta tres veces por semana, pero sin presencia de hombres, lo que coincide con la declaración de la afectada.
La Policía Nacional desmintió la versión difundida por ciertos medios, quienes aseguraron —sin corroborar fuentes oficiales— que la joven se lanzó para evitar ser víctima de violación. “Esa información es falsa y carente de todo sustento”, señala el comunicado.
