Olanchito, Yoro – La tan esperada lluvia finalmente ha llegado a las comunidades de Tepusteca y San Luis, marcando el inicio de la temporada de lluvias en Olanchito. Estas primeras precipitaciones han sido recibidas con alegría y alivio por los residentes, quienes han estado enfrentando una severa sequía que secó ríos y dañó varios cultivos en el Valle del Aguán.
Las gotas de lluvia, al caer sobre los campos secos, han comenzado a despertar la esperanza en los agricultores locales, que han visto sus esfuerzos y cosechas amenazadas por la falta de agua. La sequía prolongada había dejado un paisaje desolador, con tierras agrietadas y ríos convertidos en lechos polvorientos.
“Es un verdadero alivio ver la lluvia caer después de tantos meses de espera,” comentó un agricultor de Tepusteca. “Esperamos que estas lluvias continúen y podamos salvar lo que queda de nuestras cosechas.”
A pesar de la alegría en estas comunidades rurales, la situación en el casco urbano de Olanchito y en los nacimientos de las microcuencas sigue siendo crítica. Hasta el momento, no se han registrado lluvias en estas áreas, y la preocupación persiste entre los habitantes que dependen del agua de las microcuencas para su abastecimiento diario.
“La llegada de la lluvia en Tepusteca y San Luis es un buen augurio, pero necesitamos que estas precipitaciones se extiendan también al casco urbano y a las zonas de las microcuencas,” señaló el Jefe de la UMA de Olanchito. “Sin agua en estas áreas, la crisis hídrica continuará afectándonos gravemente.”