En un vibrante y agradable partido, el Real España escaló a los primeros lugares, merced al justiciero triunfo 3-1 en el clásico sampedrano, ante un Marathón, que vio frustrada sus aspiraciones de escaparse en solitario en el primer lugar de la tabla de colocaciones.
LAS ACCIONES
La rivalidad más importante de la Costa Norte se retaba en una calurosa tarde en el estadio Olímpico, Miguel Falero ante Hernán Medina, en su derby 249,mostraban desde el inicio sus “malas” intenciones con planteles netamente ofensivos.
Y así lo confirmaron los 22 jugadores en la cancha, el pulso se volvió de ida y vuelta, con jugadas apremiantes en ambas porterías, pero el aurinegro ante su necesidad, fue algo más, se posesionó de la redonda y en esa faceta, su fútbol ofensivo dio sus frutos porque al 27’,el rival se vio debilitado al quedar con diez hombres tras la expulsión de Javier Arriaga
Cuando todo indicaba que la resistencia verdolaga daba sus frutos, tuvo que ser el panameño Carlos Small quien le diera la ventaja con un gol de cabeza cuando se jugaban los 45+1.
Pero la tarde noche se le vino encima al Real España, porque al 47’ se quedó con diez hombres con la expulsión de Devron Gracia, sin embargo el flujo de juego siguió incesante, buscando esa segunda anotación y en esa instancia fue el Marathón que con fulminante contragolpe llegó a la igualada 1-1 al con anotación del recién ingresado Junior Lacayo.
No obstante y cuando todo indicaba que el duelo repartía tablas para ambos, dos goles uno de Dixon Ramírez al 89’ y otro de Sebastián Hernández al 90+5, pusieron justicia en el marcador para darle un merecido triunfo 3-1 al conjunto españista. (CR)