Yoro, Yoro – En el olvidado departamento de Yoro, un rótulo anuncia trabajos de reparación en la carretera, pero la realidad es muy distinta.
Tras los deslizamientos de piedra y tierra provocados por las lluvias de las últimas 24 horas, no ha sido el gobierno ni las autoridades locales quienes han tomado la iniciativa para limpiar la vía.
En su lugar, cuadrillas de voluntarios, armados solo con picos y palas, se han dedicado a despejar la carretera entre los municipios de Yoro y Morazán.
“A nadie le interesa ya esta carretera, ninguna autoridad ha respondido para rápidamente quitar el material sobre el pavimento”, expresaron los conductores, frustrados por la falta de acción por parte de las municipalidades vecinas y de la Secretaría de Infraestructura y Transporte (SIT).
El tramo de Cuyamapa, donde se presentan cuatro deslizamientos, es una muestra más del abandono en el que se encuentra la infraestructura vial de la región.
Sin embargo, los pobladores de Yoro continúan demostrando que, ante la indiferencia oficial, es el mismo pueblo el que se ayuda a sí mismo, manteniendo la esperanza y la solidaridad en medio de la adversidad.